Historia de la estadística en el Ecuador
La historia de la estadística en el Ecuador forma parte de la necesidad humana de numerar, cuantificar, calcular e inventariar acerca de los objetos que rodean al ser humano a lo largo de la historia y que se expresan en gigantescas recopilaciones de datos que se van perdiendo en el transcurso de los siglos. Para Moncayo, García, Sempértegui, & Miño (2015), indican que en el segundo cuarto del siglo XX se posicionó en la opinión pública nacional y en su institucionalidad el aparentemente sobreentendido de que en Ecuador las estadísticas demográficas no tenían vigencia antes del año 1950. Se indicaba que el conocimiento y la ciencia no lograron conseguir este importante espacio matemático institucional, y se mantuvo en el campo de las grandes especulaciones de brillo internacional. Esto, mientras se hacía caso omiso de unos registros condenados al silencio y ricos sobre información de la historia social, se considera a la estadística como gran campo en disputa que no puede quedar al margen de la historia social, misma que explica las distorsiones que se suscitaron en el pasado, no por la escasa capacidad en el manejo técnico sino por el conflicto que demandaban dichas actividades de dominio social en el campo poblacional, electoral y tributario.
Con la constitución de la República del Ecuador, sus primeros
presidentes, Juan José Flores y Vicente Rocafuerte, continúan con el interés de
formar una enumeración completa y al día de toda la población de Ecuador.
Ellos, personalmente, obligaron entre 1838 y 1840 a los intendentes de cada
departamento y a los gobernadores de las provincias a empezar los nuevos
empadronamientos y “casi lo lograron”. Desde el nacimiento de la República en
1830, en la primera Constituyente, nace la necesidad de contar con la información
estadística, para la representación de diputados de tres departamentos (Azuay,
Guayas y Quito) que en ese entonces conformaban el Estado de Ecuador, se lo
haría según un censo de población, aunque entre 1830 y 1973 se insertaron
varios organismos que se encargaron de las estadísticas y los censos en el
país, no fue hasta el 7 de mayo de 1976, mediante el decreto 323, que se crea
el (INEC) Instituto Nacional de Estadística y Censos, por la fusión de la
Oficina de los Censos Nacionales, el Instituto Nacional de Estadística, y el
Centro de Análisis Demográfico.
Con el retorno al país a un régimen con derecho, se expide una nueva Constitución Política, en la que se crea el (CONADE) Consejo Nacional de Desarrollo, cuyas funciones fueron reguladas a través de Ley Orgánica, ley en la que se determina entre otras que eran entidades integradas al CONADE, el (INEC) Instituto Nacional de Estadística y Censos.
De modo que, con el transcurso del tiempo
se emprende en la realización de numerosos estudios demográficos, de salud,
económicos, transporte, educativos e infraestructura, los cuales se complementaron
con los estudios en el exterior de técnicos ecuatorianos, la enseñanza de la
estadística en las universidades nacionales y la demanda de capacitación de
profesionales por parte de la Caja de Pensiones que en la actualidad es el
Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social. La Constitución Política expedida el
10 de agosto de 1998, elimina al CONADE, y el doctor Jamil Mahuad presidente de
la república de ese entonces inserta al Instituto Nacional de Estadística y
Censos al Ministerio de Economía y Finanzas.
El 20 de julio de 2007, por medio del
Decreto Ejecutivo publicado en el Registro Oficial N°. 141, se agrega al (INEC)
Instituto Nacional de Estadística y Censos a la (SENPLADES) Secretaría Nacional
de Planificación y Desarrollo, para fines técnicos, operativos, administrativos
y financieros, ejercerá sus funciones y atribuciones de manera desconcentrada e
independiente.
Luego el censo 2010 fue de realizado de modo incluyente. Así, los primeros censados fueron las personas sin vivienda, en la noche del 27 de noviembre. Especial importancia se dio al levantamiento de información de las personas con discapacidad. El tema de los migrantes también fue relevante. Por primera vez en la historia del censo se ejecutó un proceso desde los Pueblos y Nacionalidades para la construcción participativa de las preguntas de autoidentificación, pertenencia de un pueblo o nacionalidad y de lengua materna, así se respetaba el derecho de las personas a decidir de carácter libre y voluntario su pertenencia a una nacionalidad, etnia o pueblo indígena, montubio o afrodescendiente. El (INEC) Instituto Nacional de Estadística llegó con el censo a las zonas más alejadas del país. Los empadronadores recorrieron diversos kilómetros para arribar hasta el último rincón de la geografía ecuatoriana en una tarea que para el área rural tomó siete días, desde el 29 de noviembre hasta el 5 de diciembre de 2010. Bajo la norma que el censo “a más de ser una operación estadística que reviste importancia por su utilidad en la futura definición de la política pública, requiere de una alta preparación operativa, tanto interna como de otras instituciones del Estado”, el INEC trabajó en el proceso censal durante tres años.
En la actualidad el INEC se encuentra en un proceso de transparencia y de liberalización con bases de datos por medio de nuestro compromiso con el país de conceder cifras de calidad, de forma adecuada y oportuna. El Instituto ha implementado portales y servidores proveedores de información de las encuestas (www.inec.gob.ec,www.ecuadorencifras.com, el Banco de Información y el Visualizador ESPAC) para garantía de la disponibilidad de este servicio. Así mismo se encuentra efectuando mecanismos didácticos de difusión estadística y la segmentación de la información como la creación de la (CONEPIA) Comisión Nacional de Estadísticas para Pueblos Indígenas y Afroecuatorianos; y el INEC para niños y niñas del país.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Moncayo, J., García , J., Sempértegui,
B., & Miño, W. (2015). Una Mirada Histórica a la Estadística del Ecuador. Primera
Edición, 126.
https://www.ecuadorencifras.gob.ec/historia/
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